Vacunas y botiquín

Vacunas

Cuando tengáis una idea del itinerario de vuestro viaje, debéis acudir a un centro de vacunación internacional para que os digan qué vacunas necesitáis llevar puestas en vuestro viaje. Estos centros, por lo menos en Madrid, funcionan con cita previa y no es recomendable apurar demasiado la fecha del viaje. En el centro había varios carteles advirtiendo de que no se atendía sin cita.

En nuestro caso, fuimos un mes y medio antes de partir y casi no nos da tiempo a llevarnos puesta la última vacuna.

Hemos encontrado este esquema de vacunación internacional que sirve para hacerse una idea pero es mejor ir al centro de vacunación y que allí te digan cuáles necesitas.

En nuestro caso eran las siguientes:

Fiebre Amarilla: por si vamos a Argentina -es una de las posibilidades de nuestro itinerario- Además, nos advirtieron que si procedes de un país donde hay fiebre amarilla te pueden exigir la cartilla de vacunación en la frontera de otro país y no dejarte entrar si no vas vacunado. Esta vacuna nos la pusieron en el propio centro de vacunación internacional y el precio rondaba los 20€. Es importante tener en cuenta que se trata de una vacuna de gérmenes vivos y, por protocolo, te hacen esperar un mes para ponerte la siguiente. La duración de esta vacuna es vitalicia.
Fiebre tifoidea: por Asia. Para esta vacuna nos hicieron ir a nuestro médico de cabecera a que nos la recetara para poder comprarla en la farmacia. El precio no llega a 10€. Son pastillas y te las tomas tú en tu casa. También son gérmenes vivos así que es muy importante conservarla en la nevera. Una vez las tomas, el efecto de la vacuna dura 3 años.
Hepatitis A: También nos dijeron que pidiéramos cita con el médico de cabecera para que nos la recete. Y luego cita con enfermería para que nos la pongan. Esta es algo más cara (45€).

Otra de las vacunas necesarias es la de la hepatitis B pero en España nos la suelen poner de pequeños y nosotros ya la teníamos

Malaria

Otra de nuestras grandes preocupaciones era la malaria. Yo pensaba que estaba presente en toda África y prácticamente en toda Asia pero en el centro de vacunación internacional nos explicaron que no es así. De hecho, nos explicaron que solo hay malaria en el sur de la India (nosotros vamos al norte), en Laos y en zonas muy concretas de Camboya e Indonesia (De Bali hacia la derecha).

Por otro lado, no existe vacuna contra la malaria, solo un tratamiento preventivo.

Habíamos oido historias de gente a la que le sienta fatal el tratamiento preventivo y, efectivamente, el médico nos recomendó no tomarlo. Eso si, nos ha dicho que nos llevemos el tratamiento (También te lo receta el médico de cabecera) por si la cogemos. Al parecer el tratamiento si la coges es el mismo que el preventivo pero en mayores dosis.

Otra de las recomendaciones para la malaria o paludismo es tomar tónica. Esta bebida contiene quinina que es un alcaloide que se encuentra en la corteza del árbol de la quina (Cinchona pubescens). La quinina se ha utilizado para tratar la malaria, siendo el mejor agente para combatir la enfermedad hasta la década de 1920. El tratamiento de la malaria por quinina marcó el primer uso exitoso de un compuesto químico para el tratamiento de una enfermedad infecciosa.